En una decisión que sin lugar a dudas generará polémica, el Distrito acaba de anunciar que con motivo del partido entre Colombia y Japón que tendrá lugar mañana durante 24 horas no habrá control sobre el consumo de algunas sustancias psicoactivas al tiempo que mantiene la veda sobre la venta y consumo de licor.
“Vimos que era una oportunidad ideal de concretar todo lo que esta administración ha querido avanzar en materia de cambio de enfoque en el tratamiento del problema de las drogas, de un tratamiento represivo a una política más abierta que asume el asunto como un asunto de salud pública que requiere regulación antes que represión”, anunció un vocero del Palacio Liévano.
“Tenemos decenas de estudios a la mano que prueban que el consumo desmesurado alcohol, a fin de cuentas una droga legal, le genera costos muchos más altos a la sociedad que el de sustancias como la marihuana, los ácidos o el éxtasis. Una botella de aguardiente es camino seguro a la agresividad, es detonante de riñas y violencia intrafamiliar, todo lo contrario de un ‘bareto’ que apacigua al consumidor y lo pone en una tónica de relajación, risas y voluntad de compenetración con su entorno ”, añadió la fuente.
La medida, que operará desde las cero horas de mañana martes 24 de junio hasta las cero horas del miércoles 25, incluye a la mayoría de las llamadas drogas blandas con excepción de la cocaína, la heroína y el bazuco. Se ha dispuesto la ubicación de un CAMAD (Centros de Atención Móviles para Drogodependientes) en cada uno de los puntos de mayor concentración de aficionados, incluido el Parque de la 93.
Fenalco Bogotá y Asobares calificaron la decisión como “un solemne disparate”, mientras que la embajadora de Holanda en Colombia, Anna VanBeukeren aplaudió la audacia del alcalde Petro y ofreció el pleno respaldo de su gobierno, a la vanguardia mundial en estos asuntos desde la década del setenta. Consultado al respecto, el Procurador General de la Nación sufrió un súbito desvanecimiento.
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