El senador Carlos Fernando Galán conoció esta mañana el sentimiento de autosuficiencia al ganar una rifa sin ayuda de nadie.
La rifa, que había sido organizada para el cumpleaños de un miembro de su unidad de trabajo legislativo, era de un tajalapiz de pokemón y para participar en ella, el senador debió escribir su nombre en un papelito que luego fue puesto junto a los demás en una tómbola. Al escoger el papel ganador, para sorpresa de todos, el ganador fue el mismo Galán, quien presa de la incredulidad, sufrió un ligero soponcio.
«La verdad nadie lo tenía pensado, pero esta vez todos fuimos testigos de que el senador se ganó la rifa por sus propios méritos y sin ayuda de nadie. Incluso yo soy testigo de que escribió su nombre en el papelito con su propio puño y letra.»
Tras conocerse el resultado de la rifa, el Senador dio un breve discurso de agradecimiento en el cual se refirió a sus largos años de relación con el sector público desde sus años de concejal, pasando por su candidatura a la alcaldía de Bogotá y terminando con su llegada al Senado. Prometió el relanzamiento de la tarjeta jóven que en su momento promovió su hermano Juan Manuel y se sentó a tajar un lápiz mirado número 2 proporcionado también por el Estado.
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