Varios hechos delincuenciales han empañado la marcha contra la corrupción, convocada por el Centro Democrático y que ha movilizado a cientos de personas en todo el país.
La policía ha recibido reportes de robo de billeteras, joyas y celulares con la modalidad del cosquilleo, en prácticamente todas las ciudades donde se llevan a cabo las marchas. Hasta el momento, el volumen de denuncias ha triplicado los robos de una marcha tradicional.
«Estoy aterrada de la inseguridad y la falta de protección de la policía. Veníamos marchando con un grupo grande, todos gente de bien, y mientras un fotógrafo de Jet Set nos pedía los nombres para salir en las sociales, nos dimos cuenta de que a Mafe le habían cortado las correas del bolso. Quién sabe cuántas cuadras caminó como una boba con eso colgando», comentó una manifestante, a la altura de la carrera séptima con calle 72, al norte de Bogotá.
Un agente de la policía expresó la dificultad para detectar a los ladrones dentro de estos grupos de manifestantes: «A uno le da pena pedirle una requisa a estos civiles que marchan hoy. Como la mayoría tiene camisa de manga larga y relojes finos, uno asume que son doctores, gente honrada. Estamos acostumbrados a la vestimenta normal de los rateros».
Hasta el momento, se han recibido denuncias de pérdida de documentos de identidad, aretes, cadenas, celulares, mancornas, gafas oscuras y palitos para selfies.
En la marcha de hoy, los ciudadanos también se manifiestan en contra del proceso de paz, el gobierno Santos, la diversidad de género, la reforma tributaria y el pandebono con bocadillo, con el apoyo de varias iglesias cristianas y del youtuber y exsicario alias Popeye.