A través de su vocero, Iván Márquez, las Farc anunciaron hoy que han tomado la decisión de romper “todos los vínculos comerciales” que sostenían con el magnate Donald Trump “como gesto de solidaridad con el pueblo mexicano victimizado por sus palabras cortupunzantes e imperialistas”.
Ante la obvia pregunta de cuáles eran esos nexos, Márquez explicó que estos se encontraban en varias de las líneas de negocio de su organización. Desde los reinados “Miss FarcEP” y “Miss GoFast”, a celebrarse en septiembre en Tumaco, en los que Trump había invertido, hasta una mina de Coltán en zona límitrofe con Venezuela pasando por el contrato de asesoría que el Frente de Comunicaciones de la organización había firmado con la organización del magnate para la producción “de contenidos alternativos y con leve contenido ideológico destinado a jóvenes millenials de la comunidad latina residente en Estados Unidos”. Así mismo, se le devolverá el apartamento que esta guerrilla tenía en el edificio “Trump Ocean Club International” de ciudad de Panamá a donde era enviado como premio y por una semana el “guerrillero del mes”.
“Hemos, así mismo, dado una orden terminante a nuestros frentes que tienen la misión de enviar cocaína al imperio para de esta manera envenenarlo y destruirlo desde adentro de procurar que esta ya no tenga como destino los espacios de esparcimiento burgués del ‘pelo’e zorro’ y sus allegados”, añadió Márquez.
La determinación incluye la cancelación de la invitación cursada a la Miss Universo Paulina Vega a la serie de charlas motivacionales TEDFarc. La reina tenía asignada una con el sugestivo título “Se puede estar buena y revolucionaria a la vez”.