La abrumadora la hegemonía de Mariana Pajón en el BMX femenino -el fin de semana pasado consiguió el octavo título de los últimos nueve disputados en el circuito mundial de esta especialidad- puede llegar a su fin si se concretan los anuncios hechos hoy por el máximo jerarca del pedalismo mundial, el británico Brian Cookson.
Y es que tal nivel de superioridad que es motivo de alegría para ella y para todos los colombianos comienza a preocupar al ente rector de este deporte. En efecto, la Unión Ciclística Internacional varias veces ha dejado ver su preocupación por los efectos negativos que la supremacía de la antioqueña puede traer para una especialidad que apenas se consolida.
“El éxito de Mariana, a quienes todos en la UCI queremos y respetamos mucho, se ha convertido, por desgracia en un escollo para nuestros planes. La audiencia de sus competencias ha caído en picada pues con ella en competencia se pierde cualquier interés por el desenlace que ya es seguro, gana ella”, afirmó.
“También ha sido un inconveniente para las casas de apuestas, pues todos se van con ella y nadie finalmente gana, no hay incentivos. Todo esto nos ha llevado a tomar medidas, claro, siempre en coordinación con ella”. Al parecer la primera propuesta fue que participara con los ojos vendados ante lo cual la paisa habría contestado, “la chimba parce, me mato”. Finalmente deportista y entidad acordaron que en las próximas citas ella partirá con retraso de 10 segundos y con las llantas pinchadas a fin de mantener vivo el interés por el BMX élite femenino.
“No dudamos que es una mujer tremendamente talentosa que aun en estas condiciones saldrá adelante, así somos los paisas, sea como sea, siempre echados p’alante”, afirmó su entrenador.
Desde Colombia el Fiscal General tomó la vocería, como ya es habitual, para amenazar a Cookson con una demanda por discriminación ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
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