Un acaudalado hombre de negocios que ha preferido reservar su nombre ha hecho saber hoy que tiene reservado un millón de dólares para la primera persona que logre la unificación de las tarjetas del sistema de transporte masivo de Bogotá, Transmilenio.
Este logro ha sido una obsesión de expertos en la administración distrital y en la empresa encargada de la gestión del sistema en los últimos tres años sin que hasta ahora se tengan avances. Descifrar cuál de las tres tarjetas es válida en la estación a la que ingresan se ha convertido en un calvario para los cerca de tres millones de bogotanos usuarios habituales de los buses rojos. De él puede dar fe el reconocido científico Rodolfo Llinás quien en reciente visita a la capital padeció en carne propia esta confusión.
“Entiendo que es un reto muy difícil, de ahí la cuantía del premio. Estoy seguro de que hasta ahora no había estímulos suficientes. Espero que con mi recompensa los cerebros más brillantes no solo de Bogotá sino del planeta den lo mejor de sí para descubrir la vía hacia la unificación de las tarjetas y así mejorar la calidad de vida de millones de personas. Eso es responsabilidad social”, anotó el magnate en comunicado dado a conocer hoy.
El alcalde Gustavo Petro afirmó que ver con desconfianza esta iniciativa “porque a esta ciudad no le cabe un rico más”.
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