Un detalle entre anecdótico y sorprendente alrededor del negocio que permitió la llegada de James Rodríguez al Real Madrid acaba de conocerse. Tiene que ver con la llegada al equipo del principado del veterano delantero Edwin Congo, cuyos derechos deportivos todavía son propiedad del equipo madrileño.
Al parecer, la movida se habría decidido a última hora, cuando los representantes del Mónaco se percataron de que el valor registrado en el documento era de 79.999.999 millones de dólares, pese a que la cifra acordada había sido de 80 redondos. Molestos ante la sorpresa le reclamaron a la contraparte que en una reacción rápida decidió incluir, para completar y evitar disgustos, el pase del delantero bogotano ex Once Caldas y actualmente en busca de club para quemar sus últimos cartuchos.
Se conoció además, que antes de lanzar esta carta los enviados de Florentino Pérez se aseguraron de desconectar el router que proporcionaba la señal de Internet en el hotel y así evitar una búsqueda en Google del historial del jugador.
“Aunque me agarra de sorpresa me parece una gran noticia, apenas supe agarré una Berlinave a Barranquilla porque sabía que estaban allá, pero al llegar al hotel acababan de salir. Estoy que le marco al técnico pero siempre manda a buzón después de varios timbrazos, seguro fue que que se le quedó el celular allá en Mónaco», afirmó un ilusionado Congo.
«Ahora solo tengo que alquilar un camión ojalá barato para llevar mis trastos que todavía tengo en una bodega en Barcelona, menos mal me queda ahí cerquita, por ahora voy a ver si con unas millas que me quedaron saco el pasaje a Miami y les caigo allá”, afirmó el atacante nacido en Bogotá.
Fuentes cercanas al cuerpo técnico encabezado por el portugués Leonardo Jardim pidieron al reportero de AP informarle a Congo que no hacía falta que se desplazara dado que se tiene previsto que permanezca en Bogotá desempeñando labores de relaciones públicas para el área andina.
Debe estar conectado para enviar un comentario.