Indignación y rechazo total ha causado la última modalidad de trabajo informal vista en los semáforos de un reconocido y exclusivo sector de Medellín.
Es bien conocido que el “Pole dance” o “baile de tubo” -traducción literal- está causando desde hace ya algún tiempo furor como método para quemar grasas , mantenerse en forma. Lo que nadie se esperaba es que se convirtiera también en una manera de recolectar dinero en las esquinas de la capital paisa.
Vecinos aseguran que en varios semáforos de la ciudad se presenta esta indecorosa practica de algunas jovencitas y jóvenes que hacen su rutina durante la luz roja en los semáforos.
“Uno ve estas muchachitas moviéndose en ese tubo como si le estuviera dando un ataque, además vienen casi en ropa interior y hacen eso, dígame como no van a ganar plata con toda la cantidad de pervertidos que hay acá”, segura la señora Diana Posada, del comité de señoras elegantes de la loma de los Parra. “Lo que estamos pidiendo es pudor y respeto por las familias decentes que vivimos acá”.
AP logro tener contacto con una de las bailarinas que se hace llamar Katia Boom Boom, que así se refirió a su polémica actividad: “Esto es una habilidad que tenemos y algo que simplemente creemos que es una forma de darle cultura a la ciudad y darle una cara más avanzada y menos retrograda, además son nuestros cuerpos y es una forma de expresión libre, muy natural, porque el cuerpo es un don de Dios así como la facultad de desarrollar nuestra sensualidad”.
Bueno recordar que este baile lucha para abrirse paso como deporte, al punto de que en la ciudad ya funcionan jardínes infantiles dedicados a formar a sus futuras promesas.
Los conductores, público objetivo de las personas en estado de tubobailarinidad, se muestran más receptivos que los vecinos. “A mi me parece muy bueno que las niñas se ejerciten así pero no entiendo a los peladitos que se ponen en esas ¿eso no es solo para las mujeres?”, se pregunta Arley Piedrahíta, chofer de un vehículo de servicio público.
Por lo pronto, la Alcaldía no ha tomado cartas en el asunto, mas conocimos de buena fuente que se está gestando una recolección de firmas y una carrera 10k para que esta práctica sea prohibida o por lo menos para que en las noches se engrasen los tubos así sea con la excusa de mejorar la movilidad. Y es que eses un hecho que en los últimos días se ha incrementado el volumen de automotores por esta parte del Valle de Aburrá.
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