Debido a la aguda congestión que se presenta en la capital del Valle durante la temporada de fin de año, varios centros comerciales de la ciudad y el comercio en general han solicitado a la administración municipal que se tomen medidas urgentes que les ayuden a mejorar la movilidad e incrementar sus ventas.
La más polémica es la prohibición de la entrada a los vecinos de Miranda y Yotoco, que ha causado denuncias de discriminación en redes sociales, con los hashtags #jesuismiranda y #jesuisyotoco.
Octavio Lucumí, representante de los comerciantes declaró: “Mompa, necesitamos que le metan mano a esto, no se puede ni caminar con tanta gente, pero casi nadie compra, ¿oís? A esa gente se le ocurre venirse de borondo al centro y se traen hasta a la abuelita en muletas, todos vienen de ‘miranda’ y ‘yotoco’ pero más parecen de apellido Peláez. No compran es nada. Deberían multar a toda esa gente que nada más viene a vitrinear, a ver si llevan algo más aparte del “mandarinazo” y la porción de fritanga y chuzos, de los que compran uno solo y se lo comen entre cinco».
Por su parte, los habitantes de Miranda (Cauca) y Yotoco (Valle) que por su cercanía con Cali acostumbran a visitar la ciudad para sus compras navideñas, se mostraron indignados con la medida que consideran injusta y xenófoba, y anunciaron que a partir de ahora harán sus compras en línea para no exponerse a pagar comparendos en su contra.
Zulma Peláez, caleña residente en el barrio Ciudad Jardín, se mostró de acuerdo con la medida, pues es en el centro de la ciudad donde cada año acude de incógnita a conseguir el “estren” para la navidad: “Allá consigo los mismos vestidos que en los centros comerciales, pero 10 veces mas baratos, y doña Consuelo que es mi costurera me le cambia la marquilla, tu sabes gordo, antes muerta que sencilla”, afirmó, en verso. “Así tenga que cambiarme el apellido para ir a comprar, pero no voy a quedar como la pobretona del club, y menos en plena feria”, concluyó la bendecida y afortunada dama.
