«Le voy a decir la verdad: el presidente en su vida ha jugado póker, máximo una vez en campaña y porque una señora en Aquitania lo obligó le tocó bajarse una Póker, pero no más. Nosotros no sabemos bien de dónde salió ese cuento, pero sí, lo usamos para la campaña de 2010, cuando nos pareció clave la astucia que de él se derivaba frente a ese salto al vacío que era Mockus».
De esa cruda manera, un antiguo asesor de Juan Manuel Santos reveló hoy una verdad muy incómoda sobre el mandatario, información que ha prendido todas las alarmas en los medios de comunicación para quienes la imagen del mandatario como astuto jugador de cartas había sido más que un lugar, un continente común en los últimos seis años.
«Nos joden hermano, nos joden. Eso de que Santos era un verraco para el poker era una bendición para uno, porque es que de ahí salía cualquier cantidad de comparaciones, de símiles, de metáforas. Era de verdad imposible vararse. Ahora como que parece que al tipo lo que le gusta es el Uno, pero, dígame, de dónde le arranca usted un recurso al Uno, mal», declaró un reconocido columnista.
Por ahora, el debate se concentra en si es necesario entrar a reescribir todos los textos que dibujan a Santos como un viejo zorro del póker o si basta con eliminarlos de los archivos digitales. Un cálculo inicial estimó en 78 terbytes el espacio que se liberaría.
