“Es inhumano el ritmo que nos ponen los Senadores. Póngase usted a traducir a Robledo o a Claudia López, no dan las manos”
Así lo ha expresado Manolo Orador, vocero de la Asociación de Locutores de Mano, Asoloma, tras exigir para él y sus compañeros trabajadores del Senado una reglamentación más estricta y acomodada a los estilos de los cabildantes.
“No podemos estar haciendo los alaridos de Paloma Valencia y luego pasar a la letargia de Gerlein y quedar como si nada. Tiene que haber un arbitraje serio sobre los ritmos laborales” que Orador plantea pueden seguir el modelo de los combates pugilísticos: por rondas y con intermedios animados en los que puedan reponerse.
Aún queda por ver si la solicitud es atendida con afán o si es ignorada como los recuadros de trabajo de los intérpretes.
Federico Avilán Franco, corresponsal