«Con todos los fierros», tal y como exigió el Vicepresidente, Germán Vargas Lleras, tuvo lugar ayer en la cafetería de la sede de la Vicepresidencia la inauguración de una greca de última generación.
«Con ella solucionaremos de una vez por todas y para los próximos cincuenta años el grave problema del gasto exagerado en papel higiénico fruto del consumo de tinto recalentado en microondas», tal y como aseguró el funcionario en un emocionante discurso pronunciado ante la totalidad de la planta de personal de la dependencia.
«Me siento más que orgulloso de que hoy todos los que aquí laboramos podamos decir que en la Vicepresidencia se consume el mejor tinto de todas las dependencias estatales: a temperatura ideal y sin el molesto cuncho. Y además con la posibilidad de tener reservas hasta por dos días si otra vez a los de Codensa les da por quitarnos la luz sin avisar como les encanta hacer», añadió fiel a su estilo de lanzar una que otra puya.
El evento contó con la presencia de las fuerzas vivas de la entidad, desde los encargados de las pollas para Mundiales y reinados hasta la plana mayor de su despacho. Hubo también lechona, cata de mermelada, copa de vino y bailes típicos. Momentos de confusión y apremio que por fortuna no pasaron a mayores se vivieron cuando uno de sus escoltas reaccionó con sendas ráfagas de fusil a los voladores que fueron lanzados como parte del paquete básico de inauguraciones. Por suerte, y como también es tradición, el arma se le encasquillló.
