Algo de sosiego trajo a los miles de viajeros atrapados en el trancón que se presenta en la vía que atraviesa la cordillera central la apertura hace unas horas de una sucursal de las tiendas hard discount D1.
«Nadie supo muy bien cómo ni a qué horas pasó. Ahí había hasta hace diez minutos un montallantas y sin darnos cuenta a qué horas brotó un D1, pero bendito sea Dios porque ya puedo comprar ahí los pañitos humedos para mi princesa, qué importa que tengan alcohol porque en esta necesidad qué más da, una Sprite 4 litros para los pelados y unas tostaditas ahí como para pasar el hambre. Lástima que cuando entré ya estaba agotado, como siempre, el juguito de naranja», declaró Marleny Torres, que viaja de Ibagué a Palmira.
Un vocero de Koba Colombia SAS, propietaria de la marca, aseguró que lo ocurrido obedeció al algoritmo que detecta conglomeración de potenciales clientes e inmediatamente despacha un dron con una caja que contiene una tienda verdaderamente pop-up. «Fue en estricto sentido un error, pero quisiera recalcar en que fue un afortunado error, pues los viajeros están muy contentos con lo ocurrido. Lo más probable es que el punto de venta permanezca mientras dure la congestión, es decir, hasta que inauguren el túnel, es decir por lo menos unos diez años».
Expertos consultados aseguran que el olor de la tienda ya debió haber atraído a esta hora a los algoritmos de Tostao, Cosechas, Justo & Bueno y al de por lo menos dos cadenas de barberías. La apertura de locales de estas marcas deberá coincidir por lo tanto con la visita que en las próximas horas realice al lugar el presidente Juan Manuel Santos una vez sea informado sobre la ubicación de la vital carretera.
