Así lo aprobó hoy la Asamblea de la Dimayor, luego de autorizar también el ingreso de un equipo nuevo, el Atlético Fútbol Club, cuando el torneo Águila ya acumula seis fechas.
De esta manera, se abre la posibilidad de que oncenos que terminen los primeros 45 minutos de un partido abajo en el marcador, hagan uso de este novedoso recurso y para el segundo tiempo con nombre, escudo, colores, incluso jugadores nuevos -todo se podrá cambiar menos dirigentes y dueños-,salgan a la cancha con el arco en ceros y, más importante, con los balances en tinta negra mientras los antiguos acreedores hacen fila en el tradicional y carismático mono de la pila.
«Si algo ha dejado claro la Dimayor en los últimos años es que no le tememos a la innovación. Así, hemos sido los primeros en el mundo en levantar, porque ajá, sanciones; en autorizar partidos de fútbol oficiales en diamantes de béisbol y en permitir que un mismo torneo jueguen dos equipos del mismo dueño combatiendo así la incertidumbre sobre el resultado de ciertos partidos», declaró un vocero de la entidad mientras invitaba a uno de los nuevos magistrados de la Corte Suprema a hacer parte de su tribunal de ética.
La fuente aseveró que de esta forma el fútbol profesional hace su aporte a la construcción de paz. «Si lo que queremos es una sociedad más igualitaria con miras al posconflicto, que mal ejemplo damos desde el fútbol con equipos que comienzan el segundo tiempo cuatro goles arriba, eso encarna un mensaje fatal. Esta medida busca dejar claro que, como los guerrilleros que regresarán a la sociedad, todos tenemos derecho a una segunda oportunidad, a empezar de ceros, sin menosprecio de la verdad, en la media en que el marcador de la primera mitad de todas formas quedará registrado en una tabla paralela y al final de año habrá un gran campeón de los primeros tiempos. Pero lo importante es que, sin duda, se trata de una iniciativa que se deja contagiar por el ánimo de perdón y reconciliación que poco a poco se instala entre nosotros».