Mucho se ha escrito acerca de las fórmulas para llevar una vida sana y plena. Pues el prestigioso instituto de ciencias de Viena ha descubierto que, además de una óptima dieta y el constante ejercicio, criticar a las personas nacidas entre 1980 y 1994, conocidas como ‘millenials’ podría ser la clave para lograr este ideal.
«Es por todos conocidos que entre los ‘millenials’ y la generación que los precede existe una rivalidad casi darwiniana y un resquemor que se puede ver claramente en comentarios y artículos de Facebook y LinkedIn», asegura el profesor Marc Wagner, director del Instituto en cuestión.
«Sin embargo, lo que casi nadie sabe, y que para nosotros fue sorpresivo, es que los individuos mayores de 40 que critican ‘millenials’ presentan un incremento en las endorfinas y altos indices de serotonina que podrían ser rejuvenecedores e indicadores de una mejor calidad de vida», concluye el doctor, una autoridad mundial en la materia.
La indagación revela que para una persona mayor de 40, sin importar el género o la raza, una hora en frente del teclado, despotricando de los milenials en internet, podría ser tan beneficioso como una hora en la máquina caminadora o una dieta alta en fibra.
«Tenemos evidencias de pacientes masculinos con alopecia que después de pasar 6 meses comentando que los ‘millenials’ son inmediatistas, hedonistas y perezosos, muestran pequeños brotes de cabello nuevo y reportan mejor desempeño sexual. O pacientes femeninas que despues de 3 semanas de sentar cátedra sobre la falta de compromiso de los ‘millenials’, presentan un abdomen más plano, un mejor ritmo cardiaco y un funcionamiento más regular de su sistema digestivo».
El estudio concluye que entre mayor edad tiene la persona, mejores efectos tiene el «hablar pestes» de esta población, sobre todo si se complementa con una alimentación sana y una vida activa. Incluye también indicios serios de posibles problemas coronarios entre los jóvenes que hablan mal de sus mayores.