El lamentable hecho ocurrió ayer en el parqueadero del centro comercial Parque Arboleda de la capital de Risaralda donde el popular presentador estadounidense se encontraba junto a su equipo grabando un capítulo de la nueva temporada colombiana del programa de telerealidad «Cheaters» dedicado a sorprender a infieles en flagrancia.
«Mirá: el gringo venía con dos camarógrafos detrás de una pelada que venía encendida persiguiendo a un duro había parqueado aquí su forroner con otra grilla más buena, ¿oiga?. Cuando llegaron al carro el marica ese de la nada sacó un machete y lo iba rayando, como que le agarró alguna vena porque siempre fue grande el reguero que dejó», anotó un testigo.
Según informaron fuentes de la productora el responsable de la agresión fue identificado como Jesús Armando Múnera comerciante de automóviles y precursores químicos además de propietario de una cooperativa de seguridad privada, esposo de Vanessa Aristizábal, quien habría recurrido al programa para esclarecer sus sospechas sobre una posible infidelidad de su pareja. AP a su vez pudo establecer que Múnera registra antecedentes por lavado de activos y lesiones personales.
El sospechoso habría sido sorprendido en la plaza de comidas departiendo afectuosamente con una mujer identificada como Johana Ceballos, a quien habría conocido recientemente en una fiesta de música electrónica de la que fue uno de sus promotores y en la que ella trabajaba como impulsadora de una bebida energizante.
«Le fue bien a ese gringo sapo, yo creo que el patrón se timbró al ver tanta cámara y apenas lo acarició, a otro lo va es quemando», aseguró un allegado a Múnera que pidió reserva de su identidad.
El hecho ha generado preocupación en el Gobierno, pues fue el mismo presidente Santos el que invitó personalmente a Greco durante su última visita oficial a Estados Unidos a que reviviera su programa con una temporada en Colombia . Es, además, la segunda vez que Greco es agredido mientras desempeña su labor, ya en 2007 había sido apuñalado por un individuo al que sorprendió durante sus andanzas.
«Grave, gravísimo, sobre todo porque estamos seguros de que esto es un hecho aislado, no nos vengan a decir ahora que en Colombia pasa todos los días que un hombre descubierto poniendo cachos saca un machete para defenderse, comenzando porque en Colombia las cosas han cambiado y los hombres ya no ponen cachos. Eso es gente que quiere dañar la buena imagen del país en el exterior», concluyó, preocupada, una alta fuente de la Cancillería.
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