El Sindicato de Ladrones y Carteristas de Nueva York (NYTPA, por las siglas de New York Thief and Pickpocket Association) anunció esta mañana que todos los ladrones matriculados a su asociación que se encuentren dentro del área metropolitana de Nueva York y que tengan su domicilio en el estado del mismo nombre, deberán usar camisa a rayas y un antifaz durante el 31 de octubre como muestra de buena voluntad hacia sus potenciales víctimas.
«El espíritu de Halloween también nos contagia a nosotros los ladrones y carteristas. Es por esto que, como gesto de buena voluntad, nos disfrazaremos con la tradicional camisa a rayas y antifaz para que nuestros clientes -no, no nos gusta llamarlos víctimas- puedan identificarnos, así sea por un solo día al año. No recolectaremos dulces, pero sí les pediremos a las personas de muy buena manera que nos entreguen sus cámaras, teléfonos inteligentes y dinero», manifestó Joe Manzanero, presidente de dicha asociación que vela por los derechos y condiciones laborales de los tradicionales ladrones de la Gran Manzana.
«Ir a Nueva York y no ser robado es casi como dejar de tomarse una foto en la Estatua de la Libertad. Nosotros nos encargamos de darles a los visitantes de nuestra ciudad una experiencia de asalto y de esta forma asegurar que siempre vuelvan», agregó.
La iniciativa del NYTPA tendrá lugar solo durante el 31 de octubre, día y noche de Halloween, y finalizará a las 6 a.m del 1 de noviembre. A partir de ese momento se anula el disfraz y los neoyorquinos y visitantes tendrán que sospechar nuevamente de cualquier persona como es habitual.
Redacción Internacional.
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