A partir del primero de enero todos los suicidas del país deberán autenticar las notas que dejen a sus seres queridos antes de partir de este mundo. Así lo obliga una circular de la Superintendencia de Notariado y Registro dada a conocer hoy.
«Se trata de un documento de suma importancia y trascendencia para muchas personas, por ello es importante que tenga el visto bueno de los encargados de la salvaguarda de la fe pública, porque los finados estaban escribiendo mucha pendejada alejada de la solemnidad del acto en cuestión», explicó el subdirector (e) de la oficina de asuntos tanatológicos de la entidad, Edmundo Campos.
El funcionario desmintió que el aumento de los casos de colombianos que han decidido quitarse la vida haya sido detectado por la consultora contratada por el gobierno al conocerse el déficit fiscal para 2016 y que tuvo como objetivo hallar nuevas fuentes de recursos para el fisco.
Campos añadió que en este momento está en estudio la posibilidad de abrir en todas las notarías una fila especial para quienes acudan a realizar este trámite. Este requerirá también la presentación de una declaración extrajuicio en la que se exponen los motivos que motivan la decisión, la constancia del pago de los aportes a salud y pensión, un paz y salvo emitido por Datacrédito, cuatro referencias comerciales, estados financieros, certificación bancaria y autorización expresa del sacerdote de su parroquia o, en su defecto, del procurador regional. «Nada del otro mundo, como cualquier otro trámite. Al contrario, agradezcan que este lo pudimos simplificar en la ley antitrámites», concluyó Campos. «La idea es que el ciudadano descanse en paz y salvo».