Algo que nadie jamás se imaginó que podría ocurrir le vino a suceder hoy a Julián Torres Fonseca, estudiante tolimense de diseño industrial residente en Cali.
«Sí, es verdad. Mi tía me mandó una cadena en la que me amenazaban que si no compartía a por lo menos 50 contactos una oración al Jesús de la gran licitación me cerraban el whatsapp», relató, consternado a este medio.
«Yo, obvio, no creí. Es que tengo 74 tías contando las políticas y al día cada una me manda un promedio de 65.3 cadenas iguales con la misma amenaza y pues nunca me había pasado nada, pero sí, esta vez sí pasó», añadió entre atónito y molesto.
«Mire: acabo de recibir un mensaje de Green Instant Messaging Holdings Corp Bermuda -empresa dueña de Whatsapp- en el que me notifican que por no haber ayudado a compartir la gracia y las bendiciones del Christ of the glorius bidding me cancelan definitivamente el servicio sin derecho a rechistar».
«Dejame lo proceso. Pero por ahora el mensaje es que crean, millenials de Colombia, crean en los sustos que les meten sus tías, dejen tanta soberbia, que en cualquier momento les cae la dura lección de humildad. Valoren más los piolines, no dejen en visto a la unidad familiar».