Aguda controversia ha generado a la hora del desayuno la nueva promoción de una conocida marca de cereales que ha decidido incluir en sus cajas una ampolleta de insulina en lugar de las ya conocidas figuritas de acción y aquellos ‘muñecos de toda la vida’.
El incentivo, según el fabricante, busca que los niños se vayan familiarizando de manera lúdica con esta hormona, empleada en el tratamiento de la diabetes. Los primeros en atragantarse con las hojuelas mientras veían el contenido de las cajas fueron los padres, quienes jamás habían relacionado un alimento tan práctico y delicioso con la peligrosa enfermedad.
Por su parte, los congresistas que históricamente han defendido el derecho a la libre empresa y el cultivo de la diabetes como patrimonio cultural de la nación apoyaron esta campaña y aprovecharon para descalificar a quienes se oponen a los alimentos azucarados. Este fue el caso de Dulcelina Muñetón y Tony Obesso, quienes a una voz afirmaron: “Esa moda progresista de quitarle el azúcar a todo va a convertir a este, el país más feliz del mundo, en una cueva de flacuchentos amargados y para colmo socialistas. ¿Cuándo han visto ustedes a un gordito triste? ¡Jamás! Incluso cuando quedan en silla de ruedas siempre sonríen y son ejemplo de superación para el resto de sus compatriotas, además el consumo de carbohidratos es fundamental para controlar el virus de la “homosesualidad” que está rondando los colegios del país».
Por su parte, RedPaPaz, organización que viene luchando por el derecho a la información de los consumidores, expresó que el cambio que se necesita no está en los juguetes sino con advertencias claras en el frente de los empaques.
Otras empresas de comidas han empezado a unirse a las de cereales en esta innovación y han empezado a incluir en su cajita alegre bonos para reclamar muletas, prótesis, estetoscopios, glucómetros, medidores de tensión arterial y seguros exequiales. «Sabemos que nuestros consumidores frecuentes tarde o temprano van a necesitar este tipo de productos, entonces pensamos que es la mejor manera de darles gusto», explicó Melvin Barriga, gerente de marketing.
