Un error involuntario le dio hoy una de las más importantes carteras del gabinete al ex ministro de TIC, Diego Molano Vega.
«Ay mi corazón, figúrese que para lo del contrato y el acta de la posesión yo hice la búsqueda y me salió una ya a su nombre y yo pues contenta porque me ahorraba alguito de trabajo y qué iba a saber que era usted y no el que quería mi jefe. Eso sí quién les manda llamarse igualito», le dijo esta mañana una asistente administrativa de la Casa de Nariño a Molano Vega.
«Ya le tengo todo listo y eso ya no se puede echar para atrás, o sino nos lleva el mismísimo secop y ahí sí se cae este país», continuó.
«Por qué no se viene en una carrerita con los papelitos que usted ya sabe, la cédula al 150, pago de planilla, RUT pero actualizadito, certificados laborales, certificación bancaria y todo eso y se me posesiona y vemos a ver si mi jefe no se da cuenta, usted sabe que él es como despalomado a veces», le planteó a continuación.
Desconcertado pero con algo de entusiasmo, Molano Vega hizo caso y es, a esta hora, el nuevo ministro de defensa. El nuevo integrante del gabinete es reconocido por propios y extraños como el padre de la actual y promisoria camada de webcammers colombianas y colombianos, toda vez que fue gracias a las tabletas que este se empeñó en regalar a manos llenas durante su paso por el ministerio de TIC que cientos de miles de jóvenes encontraron una inigualable fuente de ingresos.
Lo ocurrido plantea un serio reto para Duque, pues una ley de 1865 todavía vigente es clara en que, una vez nombrado, un ministro de defensa tiene que permanecer por lo menos tres (3) meses calendario en el cargo ‘por razones de seguridad nacional’. Y es que apenas tuvo lugar el acto administrativo a Molano, Vega, se le informó sobre temas de extrema sensibilidad relacionados con el accionar de la fuerza pública tales como cuándo vence la tecnomecánica de los Kfir, dónde está la copia de las llaves de los tres Cascabel y los dos Urutú todavía en operación, la contraseña de la cuenta de Spotify de la emisora de la Policía Nacional y la lista de soldados bachilleres recomendados por senadores para viajar al Sinaí.
Poco dado a reconocer sus errores, Duque acaba de afirmar que todo estaba planeado y se mostró complacido de contar con un funcionario como Molano Vega en su gabinete. «Su pasado quedó atrás, él nació de nuevo a la verdadera vida tras una terapia de tres días de reorientación ideológica en Yarumal que le permitió dejar atrás su castrochavismo. Él ya es un colombiano de bien, come carne, acumula tierras y paga mucho menos impuestos de los que le corresponderían. Ya es, en definitiva, de los Molano bien. Nada que ver con los mal, los de Alfredo».
Por su parte, Molano Aponte se mostró agradecido con el presidente Uribe por su designación como tesorero adjunto de la muy uribista fundación del Terrateniente desconocido con sede en Puerto Boyacá, Boyacá.
