Lanza en ristre contra los llamados «chismógrafos», que por décadas han sido utilizados como red social análoga y medio de comunicación contracultural por estudiantes del país se fue el Ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas ayer.
«El ejercicio de la libertad de expresión también atañe deberes, y uno de ellos es el de su uso responsable, de tal manera que no atente contra los derechos fundamentales ni contra la seguridad nacional. En esa medida esos ‘cuadernitos’ deben ser regulados estrictamente por los prefectos de disciplina los cuáles a su vez deben ser supervisados por el Ministerio de Educación», declaró alterado y sudoroso.
«Es que con chismógrafos no puede haber paz. Carcomen los cimientos del tejido social escolar. Son verdaderas armas de guerra, grises invernaderos de la semilla de la discordia en los salones, este Gobierno sí tiene los calzones para ponerlos en cintura».
El funcionario propuso a cambio «Chismógrafos de la paz y la convivencia escolar», cuadernos que los alumnos deberán rotar todas las mañanas y en cuyas páginas aparecerán preguntas «que sean verdaderos aportes al clima de paz que necesita el país» como: «¿Qué tanta verdad has aportado sobre la desaparición del cargador del celular de tu amiga? ¿Estas comprometido con la no repetición del planchazo que le metiste a tu rival en el partido de fútbol del recreo?¿Ya le pediste a tu operador de cable el canal Farc Kids? Si jugamos al secretariado, ¿a qué comandante te pedirías?».