Todas las alertas se encendieron esta semana en los entes de control al hallarse un sorprendente caso de un contratista del Estado trabajando con contrato en enero.
El hecho ocurrió en la secretaría de tránsito de Soledad, Atlántico, donde Omar Mendoza viene laborando desde el pasado seis de enero en calidad de asesor estratégico para el proyecto de sensibilización en normatividad de tránsito entre población en situación de equinidad. Su contrato, según pudo constatar este medio, estuvo listo, para mayor sorpresa, el mismo día que llegó a trabajar, es decir, el seis, y va hasta el 31 de diciembre de este año.
«Sí, el tema nos alarma. Y aunque en rigor no parece ser una anomalía, a todas luces no es normal», aseguró Martín Celedón, vocero de la Procuraduría regional del Atlántico. «Es enero, el señor Mendoza es contratista y ya tiene contrato, es algo extraordinario que llama la atención», complementó, Álex Torralba, de la contraloría departamental.
El hecho ha trascendido hasta el alto gobierno, donde también hay inquietud, dado que «se está sentando un precedente terrible, que nos obligaría a pagarle 12 meses en lugar de 10 a los contratistas de todo el Estado. Es mejor cortar por lo sano, pues a ese señor le puede dar después por exigir contratación directa sin cooperativa, vacaciones remuneradas, caja de compensación, cesantías, y quién sabe qué más excentricidades sentando un precedente fatal que nos obligaría ahora sí a vender a Shakira para poder responder», afirmó una alta fuente del Ministerio del Trabajo.