Un reciente estudio de la Universidad de Navarra (España) reveló que los hijos de personas estériles tienen un 85% de sufrir problemas de infertilidad.
«Es el estudio más largo que se ha hecho hasta la fecha en el mundo», declaró la doctora Marta Tramarría, uróloga, jefe del departamento de sexología del hospital Jorge Linares Duque. «Venimos haciendo seguimiento a varias generaciones de parejas con problemas de infertilidad desde 1960 y, comparados con el grupo de control, sus hijos tienen 10 veces más probabilidad de ser estériles».
El estudio, financiado con recursos públicos, analiza muestras de ADN de personas que por una u otra razón no logran la anhelada visita de la cigüeña. Luego, con complejos modelos estadísticos, se analiza la probabilidad de que en dos, tres o cuatro generaciones, se repitan estos patrones de esterilidad.
«Provengo de una familia donde la infertilidad es hereditaria. La sufrió mi madre, mi abuela y mi bisabuela. Mis tías y mis tíos tampoco pudieron tener hijos. Es un problema de salud pública que debemos estudiar», enfatizó Tramarría. «Si una mujer es estéril y desea tener hijos, nuestra recomendación como científicos es que se case con un hombre que ya los tenga».
Según Unicef, para 2020 la esterilidad será, después de la abstinencia y la fealdad, la principal causa de ausencia de embarazos.
