La Procuraduría General de la Nación abrió esta mañana una investigación que involucra a varios funcionarios del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones tras conocer que en junio, durante la campaña electoral, este ente regaló 400 tabletas con el juego candycrush a una fundación de niños que padecen diabetes.
Tras recibir el regalo los menores comenzaron a jugar el popular juego y, como era de esperarse, no pudieron contener las ganas de rellenarse de dulces lo que complicó su estado de salud.
«Ellos estaban felices con las tabletas al principio, pero después de jugar candycrush se fueron en masa a la tienda a comprar dulces y ahí tiene las consecuencias… Intentamos bajarles otras aplicaciones más educativas, pero no se pudo porque los niños no tienen tarjeta de crédito, y para colmo, cuando fueron a recargarlas se dieron cuenta de que tenían enchufe europeo y no se pudieron conectar a la corriente», relata entre sollozos Milena Poveda, encargada de la fundación Corazón Dulce, que atiende a estos menores. Ahí fue cuando nos tocó llamar a los papitos y a las mamitas a contarles, con mucha pena, lo que había pasado. Ellos fueron los que decidieron quejarse ante el Procurador.
La política de tabletas subsidiadas ha sido cuestionada por varios casos como el de Aguacatilajumaquinamindó, municipio chocoano que tras recibir 40 tabletas tuvo toda su población contagiada del mal de Chagas, ya que la luz que emiten las tabletas atrae a los mosquitos portadores de dicha enfermedad. En Risaralda y el Norte del Valle, por su parte, se decidió entregarlas sin la función de cámara fotográfica dado que las primeras fueron mal utilizadas por las niñas como trampolín de su carrera en el modelaje erótico de bajo presupuesto.
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