En una decisión que promete levantar polvareda, la DIAN anunció hoy que las populares «pollas» muy comunes en las oficinas del país cuando se aproxima una Copa del Mundo tendrán que pagar IVA.
«Contratamos un estudio que nos arrojó datos reveladores: solo por motivo de pollas en año de Mundial se mueven en el país alrededor de 430.000 millones de pesos, ahí hay una cantidad importante de recursos que se están perdiendo y que muy bien nos caerían para que el país no pierda el impulso que trae «, asegura un vocero del organismo.
La pregunta obvia es cómo hará la entidad para ejercer control, pues este tipo de actividades suelen ser de caracter informal, casi artesanal: sus cuentas se llevan en hojas de cuaderno y su divulgación muchas veces no trasciende la cartelera de la cafetería. La respuesta es desconcertante: «en todas las oficinas del país tendremos a una persona que, a cambio de una rebaja del 60 por ciento en su declaración de renta y un RUT premium que no hay que renovar tiene a cambio la obligación de mantenernos informados sobre cuánta gente participó y cuánta plata se recolectó, por supuesto bajo total confidencialidad», añadió la fuente.
Según lo que se ha previsto, el tributo sería del 8 por ciento sobre el total del dinero aportado por los pollistas, para el caso de las re-pollas que se suelen dar una vez terminada la primera fase este sería del diez por ciento.
Al parecer, un porcentaje de lo recaudado sería añadido al presupuesto de Coldeportes para 2015 con el fin de financiar la intervención urgente que en materia de fundamentación requiere el torneo local para que vuelva a ser competitivo y retorne la gente a los estadios. Es así como se dictarían clínicas a cargo de expertos en las que se le enseñaría a los jugadores del medio a parar el balón, a levantar la cabeza cuando están en situación de ataque y, lo más urgente, a hacer cambios de frente que no obliguen al lateral de la banda a retroceder a la carrera -casi siempre infructuosamente- hasta treinta metros como ocurre en la actualidad. Otro porcentaje se iría para pagar las terapias que hacen parte de la recuperación de Falcao que, al parecer, no las quiere cubrir su EPS por falta del sello en la orden que el emitiera el prestigioso cirujano José Carlos Noronha.
La decisión tiene en alerta a las oficinas de recursos humanos. Blanquita Contreras, directora de gestión humana de una importante entidad privada se mostró en franca oposición: «me parece terrible, esta es la puerta de entrada para cosas mucho más graves como ponerle impuesto a las vacas para celebrarle el cumpleaños al jefe o a que les dé por exigir que las empanadas que vende la señora de los tintos se paguen con datáfono, no, no, no, fatal».
La única buena noticia para los participantes de las «Pollas» es la promesa que ha hecho la entidad recaudadora de no cobrarle impuesto de ganancia ocasional al triunfador.
Debe estar conectado para enviar un comentario.