La reina consorte de España de España, Letizia Ortiz Rocasolano, aprovechó la visita del presidente electo de Colombia, Iván Duque Márquez, para enviar una encomienda de turrón de alicante y jamón de bellota a sus amigos caleños. Cabe recordar que en 1994 la hoy reina pasó unas semanas en Cali mientras participaba en el VIII Encuentro Latinoamericano de Facultades de Comunicación Social.
La entonces estudiante de periodismo de la Universidad Complutense de Madrid se llevó grandes recuerdos de Colombia y dejó algunas amistades. “Disfrutó al máximo los encantos de la capital del valle: se dijo el lujo de bailar salsa, probó el aguardiente, degustó los manjares de la Sultana del Valle, Avianca le canceló un vuelo y visitó el Comfandi de Calima” recordó Amparo Sarmiento, quien alojó a la joven Letizia en su pasó por Colombia.
Según María de los Ángeles Molina, asesora real, de tiempo atrás Letizia había querido enviar un recuerdo a sus amistades caleñas. No obstante, la precaria situación económica de España, sumada a los escándalos recientes en los que se ha visto envuelta la casa de Borbón llevaron a que la reina se abstuviera de usar fondos públicos para mandar el paquete.
Sin embargo, la Reina encontró en la reunión de su marido con el presidente electo de Colombia el vehículo perfecto para hacerle llegar un cariñito a sus amigos vallecaucanos.
“He querido mandar esta encomienda desde hace varios años, pero me ha dado pena pedirle el favor al presidente Juan Manuel Santos. Por más que venga en representación de una república tropical una no se siente capaz de pedir este tipo de favores a todo un Jefe de Estado. Sin embargo, al ver que en esta oportunidad de Colombia mandaron a un simpático mozalbete que le traía un recado a Felipe de parte de los ex presidentes Uribe y Pastrana, pues me dije, no puedo mandar de vuelta a este mensajero con las manos vacías” confesó Letizia a un periodista de un medio colombiano que indagó por su curiosa petición.
Al preguntarle sobre cómo se había tomado el doctor Iván Duque su requerimiento, la Reina contó que siempre se mostró muy dispuesto a agradar a la pareja de real, pues parece que se trata de un empleado muy fiel y comedido. “Ha sido tan amable que me sentí en confianza como para pedirle que en su próxima visita me traiga una totuma de esas de manjar blanco y gelatina de pata de Andalucía, Andalucía, Valle, por supuesto. Pero le he dicho que cómo no asegure su apetito y meta la cuchara al manjar blanco le armó una crisis diplomática de proporciones mayores”, bromeó una muy alegre reina consorte.
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